La Colección L'été Doux

Todo sucedió un verano. L'été douce. Una calidez agradable se cierne sobre la ciudad. El bullicio habitual es reemplazado por una dulce entumecimiento, el ruido, un zumbido sordo y armonioso, como si toda la ciudad se hubiera escondido en un pequeño café en París.

Las calles están bordeadas de galerías de arte selectas, exhibiendo obras impresionistas de artistas locales. Los transeúntes de diferentes edades caen bajo este hechizo. La ropa es suelta, dejando que el viento refresque su piel quemada por el sol. Los sombreros de rafia caminan por la calle principal, y pequeñas sombrillas de encaje protegen cuerpos delgados y elegantes, dejando una ola de entusiasmo a su paso. Los edificios de estilo Bauhaus estructuran el paisaje urbano. Su verticalidad constriñe la apariencia y el efecto que proporciona a la ciudad. Los colores pastel acarician la mirada de los transeúntes, contribuyendo a la alegría y relajación general de este lugar.

Uno puede oler la libertad, la relajación del alma y la armonía vibrando en cada célula. Las emociones resuenan dentro de las personas. Luego cosquillean a través de la piel, las mejillas y los hombros quemados por el sol. El calor las lleva arriba y abajo, las contrae y las expande. Por unos segundos, flotan en formas irregulares, luego, cada vez más, se convierten en objetos por sí mismos. Los contornos comienzan desde un solo punto, luego se construyen, se ondean, toman textura y color, hasta que se convierten en obras de arte. ¿Cuántas emociones se pueden encontrar en el verano de VLAdiLA?

Junio

Las flores al lado del camino bailan al unísono, guiadas por la cadencia desigual de la brisa. En el aire flota el aroma tentador de la caña de azúcar vendida en las boutiques esparcidas de un lugar a otro. Frente a las heladerías, los adolescentes comparten impresiones sobre el clima y otras nimiedades, disfrutando realmente de la conversación y la conexión. A pesar de las largas filas, cálidas sonrisas y amables expresiones esperan para deleitarse con vainilla y pistacho o chocolate y caramelo.

Toda la Rue de Rivoli está enmarcada por alegres cerezos vistiendo sus galas. Los transeúntes están invitados a contemplar su apasionado color rojo y disfrutar de su textura carnosa y sabor ácido que despierta y vigoriza. Junto con las hojas verdes, el contraste crea una explosión de color en el tema pastel de la ciudad.

Julio

Vacaciones. De todo lo que te mantiene cautivo. De todo lo que te impide flotar, volar, ser quien eres. Las lluvias cortas expulsan el calor de la tierra, esparciendo el olor a hierba recién cortada, a la vida que sigue su curso natural. Los planes se hacen y pasan, como las olas sin espuma que se van tan silenciosas como llegaron. Nadie tiene prisa, y cada momento se vive con la intensidad de la adolescencia.

Las emociones acompañan cada momento del día. La mañana huele a naranjas y está impregnada de entusiasmo y buena energía. Con el telón de fondo de sus canciones favoritas, los adolescentes de la ciudad empiezan su día de buen humor, cada uno atendiendo a sus tabúes personales. Cereal con leche o café, tostadas con mermelada de albaricoque - el gusto es el primer sentido que complacen. El almuerzo está reservado para hacer planes. Emociones: anticipación, creatividad, alegría. En anticipación a salir, algunos de ellos pasan su tiempo perdiéndose entre las líneas de novelas de detectives o historias de amor. Para otros, las series o películas les hacen compañía hasta que se encuentran con amigos.

Alrededor de las 5pm, se siente el bullicio de la preparación. Se necesita energía e imaginación para armar el atuendo perfecto o, en cambio, calma y relajación para conformarse con la misma ropa del día anterior. Después de todo, no importa mucho. Nadie tiene nada que demostrar. Aquí, en nuestro pequeño pueblo, la gente es sustancia, mucho más que forma. En el aire de la noche flotean conversaciones sobre el viejo año escolar, sobre maestros y amores. Luego, un sueño profundo. Las ventanas abiertas enfrían el aire en la habitación, dejando entrar las alegres caídas de los grillos. Hay toda una emoción en las noches de julio.

Agosto

Mar, playa, arena. Conchas en el cabello rubio y en la playa, algas ansiosas por abrazos bajo el agua. Sol fuerte y ardiente. Piel bronceada bajo camisas de lino blanco, sombrillas multicolores, sombreros y gafas de sol. Gotas frías gotean de los vasos, y los cubitos de hielo en la limonada cantan su alegre tintineo con cada paso. Hay algo profundamente revelador en los contrastes. El calor de la arena y la frescura del mar. La tranquilidad del día y el bullicio de las fiestas nocturnas. La inocencia del niño y la curiosidad del adolescente. Amor y desilusión, miedo y valentía, todos típicos del dulce período de la breve adolescencia.

Colección de papel tapiz para adolescentes, L'été Doux

La colección de papel pintado para adolescentes, L'été Doux, ha sido diseñada con patrones y paletas de colores específicamente elegidos para representarlos. Usando elementos gráficos y geométricos, influencias de pinturas impresionistas y el estilo Bauhaus, los diseños son adecuados para cualquier estilo de diseño interior. Así que las habitaciones decoradas en un estilo minimalista están perfectamente complementadas por un papel pintado de nuestra colección de papel pintado para adolescentes. Ya sea que desees crear una pared de acento o usar el papel pintado en todas las paredes de la habitación, nuestros diseños crearán una atmósfera vibrante llena de alegría y entusiasmo.

La colección de papel tapiz para adolescentes, L'été Doux, es una celebración de la mezcla única de sentimientos y emociones que caracterizan este período. La nueva generación aborda la vida de diferentes maneras, pero lo que tienen en común es la alegría y la emoción que sienten durante el verano. Tal vez sea por las vacaciones o la oportunidad de viajar. Tal vez porque el verano significa tiempo para ellos, para sus pasiones y para lo que los hace felices y los relaja. Tal vez porque están ansiosos por la conexión, las conversaciones interminables y la amistad. Tal vez porque sienten la emoción del primer amor, o el dolor de los primeros corazones rotos. O tal vez sea porque, a pesar de todas estas cosas, estos nuevos comienzos y nuevos sentimientos que tienen, se puede capturar en una sonrisa o en una mirada fugaz, la esencia de los niños que eran hasta hace poco.